Desde su fundación en 2003, la Comunidad 1° de Diciembre ha enfrentado numerosos desafíos para consolidarse como un asentamiento humano organizado y sostenible. La falta de títulos de propiedad, la precaria infraestructura y la escasez de servicios básicos han sido obstáculos constantes para sus habitantes. Sin embargo, gracias a la unión y el esfuerzo colectivo, la comunidad ha logrado avances significativos.
La autogestión ha sido la clave para superar estas dificultades. Los vecinos han trabajado incansablemente en la construcción de calles, la instalación de sistemas de drenaje y la creación de espacios verdes. Además, han impulsado proyectos de educación y capacitación para mejorar las oportunidades de desarrollo de sus miembros.
A pesar de los logros alcanzados, la Comunidad 1° de Diciembre aún enfrenta grandes retos. La falta de reconocimiento legal de sus terrenos sigue siendo una preocupación constante, lo que limita el acceso a servicios públicos y financiamiento para proyectos de mejora, pero pronto todo eso podría cambiar debido a un proyecto de legalización de los terrenos lo que podría cambiar la vida de sus habitantes.
La experiencia de la Comunidad 1° de Diciembre demuestra que la autogestión es una herramienta fundamental para el desarrollo local. Los vecinos han demostrado que, cuando trabajan unidos, pueden superar cualquier obstáculo y construir un futuro mejor para sus familias y su comunidad.
